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Hoy he tomado café con Antonio, por unos instantes hemos
echado el tiempo atrás, el destino quiso
que los dos comenzamos a trabajar el mismo día en PANRICO, (mayo de 1988), ya con canas y con menos
pelos hemos recordados muchas de las vivencias que compartimos durante más de
25 años, pero la situación actual pronto nos hizo volver al presente. Antonio está
casado y tiene dos hijos en edad escolar, con el cierre de la Fabrica de
Sevilla se tenía que incorporar al centro de Puente Genil en el mes de septiembre,
por eso Antonio ya vive en Puente Genil con toda su familia, con sus hijos
escolarizados, tarjeta sanitaria,
mudanza, etc., ve como se ha gastados los pocos ahorros que tenia, a la
vez que va consumiendo el desempleo sin saber cuando llegara el día de volver a
trabajar tal como se acordó con la Empresa cuando se cerro la fábrica de
Sevilla, me dice que los días se le hacen larguísimos, y la angustia le aumenta
cuando al pasear por el bonito pero pequeño pueblo de Puente Genil encuentra a
otros compañeros en idéntica situación.
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